domingo, 20 de noviembre de 2011

Nina Ricci

La publicidad sabe seducirnos, tanto que somos capaces de comprar una botella miniatura de perfume y pagar por ella muchísimo más de lo que valen todos los materiales que lo conforman (frasco, liquido, bombilla, caja).

            ¿Por qué lo hacemos? Marx decía que el ser humano no desea lo que necesita sino que necesita lo que desea, Freud lo complementa al decirnos que el ser humano sólo desea lo que le hace falta; en efecto compramos para satisfacer nuestro deseo, proveniente de la seducción que ejerce la publicidad del producto sobre nosotros.

            Aquí lo relevante es que: lo que nos seduce no es el objeto sino los elementos que convergen en su publicidad. A continuación un desglose de los elementos que provocan nuestro deseo por el perfume en la publicidad de Nina Ricci.

a)Plantea un ambiente de fantasía: lo cual es evidente a partir de la introducción de un árbol manzano seco en un cuarto, al cual la última manzana que le queda resulta ser el perfume.

b)El escenario donde todo ocurre  es un cuarto, de un castillo, que brilla de blancura .  

c)El estatus que nos muestra esta publicidad es el lujoso antiguo (la trama se desarrolla en un ca

estilo).

d)El personaje es femenino: es joven (entre 18-22 años); de complexión delgada, alta; de cabello rizado, rubio y esponjado (que remite a una melena de león); perteneciente a la etnia caucásica.

Porta un vestido, que podemos ver entre rosa muy claro y blanco estilo "quinceañera" y con zapatos rojos de tacón. Esto es muy importante puesto que comunica la personalidad de la personaje: el blanco que representa la pureza; el rosa que representa la ternura y el rojo que comúnmente representa el deseo, la tentación. En este sentido se puede interpretar que la personaje juega el papel de la "niñota seductora"el estereotipo de la Lolita (del cual nos hablan  Juan Carlos Pérez Gauli y Marián López Fernández en La publicidad como reclamo. Valores y antivalores sociales)  cuya característica principal es la de seducir a partir de un rol infantil, inmaduro.

e) Las actividades que realiza la personaje son: entrar al cuarto blanco, visualiza el perfume, con una mirada que nos dice que acaba de encontrar algo que ella estaba buscando ansiosa, corre por ese objeto, escala una pila de manzanas para estirar su mano y finamente tomar esa última manzana que es el perfume.
f)Las emociones que transmite este personaje son:
     1.Desencanto (cuando abre la puerta de la habitación)
     2.Sorpresa (al visualizar que todavía queda una manzana colgando del árbol)
     3.Alegría (puesto que ya encontró lo que buscaba)
     4.Desenfreno (al correr por el fruto [el perfume] que no ha caído del árbol. Y al escalar la "torre"de manzanas)
     5.Tranquilidad (al tener en su mano la manzana)

g).La actitud juguetona de la personaje hacía la manzana, refuerza lo infantil. Sin embargo también remite al parecido con un gato cuando algo llama su atención, para el caso de la personaje lo que llama su atención es el perfume en forma de la manzana que cuelga del árbol. Por lo cual en esta publicidad podemos encontrarnos a la mujer como un símbolo de naturaleza, de lo animal, lo contrario de lo racional (en el mundo de los estereotipos creados por el hombre es normal encontrarnos que mujer y hombre son diferenciados por el término contrario, si uno es blanco el otro negro, si uno es inteligencia el otro es emoción, por ejemplo; y para el caso de las mujeres siempre nos toca ser por decirlo de alguna manera: "el término inferior" como lo es en el caso de lo emocional relacionado con la mujer y lo racional relacionado con el hombre)

        Todos estos elementos que convergen en esta publicidad para darnos un escape de la realidad y transportarnos al mundo de la fantasía, un mundo que no vivimos ni tenemos, son lo que nos seduce al consumo. 
        No conocemos el aroma del perfume, sólo podemos imaginar que huele a manzana (objeto mítico que simboliza la tentación desde tiempos bíblicos) por el envase y color de la fragancia, y la publicidad de ésta.
        Así nos seduce la publicidad.

Fuente: Perez, .J. López, M. (1996). La publicidad como reclamo. Valores y antivalores sociales, [en línea]. Fundación Dianet. Recuperado el 20 de noviembre de 2011, de http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=158004.

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